Siempre que escuchamos la palabra «gatillazo», lo asociamos de inmediato al hombre y olvidamos un hecho que es también posible: las mujeres sí padecen de indisposición sexual.

El no tener excitación del órgano sexual, es el motivo por el que la palabra se convierte en un ogro cuando en la cama ocurre esa inhibición para un sexo feliz. En el hombre, es una frustración intensa, y en la mujer, ¿es igual lo que siente?

Por un lado, el no tener una respuesta erótica al intento de su pareja para la excitación, es lo que provoca que tanto el hombre como la mujer se sientan mal, y los motivos por los que no hay respuesta son muchos: el consumo de tabaco, el alcohol, ciertas medicaciones, el estrés, el cansancio, una preocupación, la falta de concentración, y a las mujeres le sumamos el miedo al embarazo,  la rutina sexual, y una muy común, la llegada de la menopausia, que afectan negativamente a su actividad sexual, sobre todo en las mujeres maduras.

Gatillazo femenino
Gatillazo femenino

Si vemos bien esa lista anterior, podemos convencernos de que muchas mujeres, sobre todo las casadas que tienen a su cargo un hogar y la familia, se ven indispuestas muchas veces para lograr excitarse, y ahí sufren del gatillazo, solo que logran fingir, algo muy distinto en el hombre, que al no poder tener su pene en erección, es notable su problema.

En este caso de la mujer, no suele llamarse así, como en el hombre, sino que se le denomina «ausencia de deseo o inapetencia sexual«, pero el caso es el mismo. Quizás ella quiera excitarse pero no lo logra, en este caso, si el hombre insiste, no le queda otra solución que fingir, una cualidad que a las mujeres se les da muy bien en la práctica cuando quieren ocultar su impotencia erótica.

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