Ante los problemas que venimos confrontando con la crisis, algo ha ganado partido para bien de las parejas: ha subido la libido.

Según las cifras de los psicólogos, son menos los que se acercan a las consultas asediados por la falta de comprensión de la pereja o por la carencia de apetito sexual, y más los que presentan problemas de frustraciones por dificultades económicas o laborales.

La familia se une más en estos tiempos pues hay menos dinero para el disfrute fuera de casa y las opciones de relajación se buscan en el interior del hogar.

Pero hay más, se piensa que el estrés que provoca el temor a perder el trabajo o la vivienda ha hecho que las parejas busquen refugio en el sexo para aliviar sus temores y la pareja ha ganado en atracción y se ha aumentado la dopamina del cerebro por lo que la libido ha subido en un número mayor de parejas.

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