Que estés deseando con locura una cita con ese chico romántico, aparentemente cariñoso, que te dice «cariño» y te promete «el mejor rollo de tu vida», no es una novedad. ¿Quién de nosotras puede resistirse ante tan codiciado ejemplar del sexo masculino?

Yo lo haría también: un hombre guapo, cariñoso y con la promesa de hacernos feliz, no es para desperdiciar la oportunidad, solo que..¡al manso cordero le salieron garras en la intimidad!

Fuego de vida
Fuego de vida

Cuando vamos a una cita con un desconocido tenemos que saber qué piensa realmente ese hombre. Ante todo, por si no estamos tan convencidas o estamos ciegas que no distinguimos sus verdaderas intenciones, hay varias salidas que resultan favorables:

– No decir nunca donde vivimos.

– Hacer notar en las conversación, que no estamos solas, sino que tenemos padre,  hermano o algún amigo que nos cuida con celo. Los hombres al final son unos cobardes y tienen miedo de otro hombre que salga en defensa de la mujer.

– No dejar que pase la llave a la puerta donde se han dado cita.

– Estar preparada para en cuanto empiece a hacer algo que no te guste, o que creas se pasa de lo que puedes permitir, cortar rápidamente.

– Dejar dicho a alguna amiga el lugar al que te diriges, las señas particulares de tu conquista y algún otro dato que lo identifique.

Casos de violencia sexual en la relación se han dado en no pocas ocasiones, pero esto no quiere decir que todos sean igual. Es más, la mayoría de los que han tratado de hacer lo que no le gusta a la chica, se cortan de inmediato en cuanto se les detiene. Por eso, ten muy claro, en cuanto vaya a más de lo que quieras, no continúes y verás que todo termina felizmente.

Otro consejo muy sano para la relación sexual, con alguien que conoces en una página de contactos como fuegodevida, es dar un poco de largas para identificar al chico guapo, cariñoso y tan complaciente que te promete el cielo en el sexo. Poco a poco lo irás conociendo porque sin quererlo va mostrando sus rostros, si no te agrada, lo anulas de tus contactos, si es lo tuyo, a por él, que lo posarás muy bien con el hombre escogido.

 

 

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