Aunque se aconseja que comer fruta es muy sano, que ayuda a combatir los radicales libres, desintoxican y ayudan a bajar de peso, hay también otras consecuencias negativas en su ingesta en demasía.

Se puede comer lo que se desee, siempre que te limites en la cantidad. Consumir al día una cantidad mayor de mangos, de lo que debes comer, te puede traer graves problemas. El mango es muy rico en yodo, pero cuando incorporas a tu organismo más del que necesitas, y puedes terminas en un hospital.

Esa situación también atañe a las naranjas, la piña y los limones, porque el estómago a veces no los tolera en grandes cantidades por el ácido que contienen y terminas con acidez estomacal que es un padecimiento muy molesto. Y ni hablar de las guayabas y sus parientes, que para algunos organismos son intolerables porque producen cólicos intestinales. Y hasta el melón, que contiene tanta agua, puede provocar indigestión.

 

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