El dolor durante el coito y el embarazo sin tener penetración en las relaciones sexuales, son inquietudes sobre el sexo que tienen muchos jóvenes.

No es normal que una mujer tenga dolor durante el coito. El malestar puede interferir en su respuesta sexual. Quizás una mala preparación durante el juego amoroso previo al contacto haga que la vagina no se lubrique lo suficiente y la mujer sienta molestia. Si el dolor persiste lo más aconsejables visitar al médico.

La inseminación artificial es uno de los casos en el que la pareja puede conseguir un embarazo sin el contacto sexual. Ahora bien, los espermatozoides son células con gran capacidad de movimiento. Si el semen es eyaculado cerca de los genitales de la mujer, aunque no sea dentro de la vagina, estos pueden penetrar por sus propios movimientos y alcanzar el útero y fecundar el óvulo, en caso de estar presente.

El himen puede incluso estar intacto durante el juego amoroso. Esas historias de quedar embarazada por secarse con una toalla de un varón, o sentarse en un inodoro u otro juego con ropas no son más que cuentos. El embarazo es consecuencia de una relación íntima sexual completa o incompleta, pero real.

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