La acromegalia es una enfermedad crónica que puede afectar a cualquier persona y es un trastorno metabólico y endocrino, causado por la secreción excesiva de la hormona del crecimiento.
Es una lamentable dolencia que transcurre de forma lenta y con cambios corporales anormales. Esta hace que los afectados sufran de aumento de tamaño desproporcionado. Generalmente se relaciona con el desarrollo de un tumor benigno en la glándula hipofisiaria.
No se debe confundir con el gigantismo. A los acromegálicos le crecen los huesos de la cara, mandíbulas, manos, pies, cráneos, orejas, nariz, labios, lengua y las facciones de la cara se le deforman. También se le agrandan los órganos vitales, las vísceras y otros tejidos blandos.
Esta enfermedad trascurre con dolor y dificultad a la masticación, piel engrosada u exceso de sudor, voz ronca y en las mujeres ciclos menstruales irregulares. En los hombres tiende a que haya impotencia sexual y en ambos sexos disminución de la libido y tendencia a la diabetes.
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