Sentir la temperatura más fría no es motivo alguno para que tu erotismo se vea escondido. Aprende a liberar tu sensualidad en la estación más cool, te aseguro que lo pasarás muy bien si escoges las mejores armas.
El otoño es un tiempo precioso y divino para relajarse y mostrar mucho más los rituales de seducción, que nada tienen que ver con el verano. Al encuestar a un grupo numeroso de mujeres en los países del norte de Europa y América, afirmaron en un 74% que prefieren mucho más el otoño al caluroso verano para sentirse sexys.
Es cierto que el verano destapa el cuerpo, pues aunque andar muy ligeras de ropa y sin ella en los lugares determinados, les aumenta el deseo sexual, a los pocos días, de tanto sentir el calor sofocante sol, pierden el fuego del cuerpo porque el fuego ambiental se interpone de manera muy molesta.
En otoño, apetece mucho más darse un baño de agua tibia,, un baño de espumas y hasta una sauna. El baño, lo mismo en la ducha que en el bañera es lo máximo para sentir como por algunos minutos la piel se dispara en deseos eróticos. Si las bañeras hablaran, es mucho lo que contarían.
Por otra parte, acostarte desnuda y dejar que el cuerpo sienta la sensación agradable de una manta calentita, suave y que produce cierta estimulación sanguínea, es lo máximo para la sensualidad. Nada hay como un fresquito que nos obligue a taparnos si tenemos toda la noche por delante.
Si quieres potenciar más a tu erotismo cuando estés en la cama, aprovecha para llamar a tu chico mientras estás así, limpia, perfumada, desnuda, con el cabello suelto y con unos deseos enormes de sexo que no puedes aguantar. Algo que tampoco falla es contarle al amigo con el cual chateas por Internet, lo que estás haciendo. Los dos se sentirán tan calientes, que las redes explotarán de tanto fuego. Esta es una de las muchas ventajas de las páginas de contacto.
Como ves, tanto si tienes un novio como si es un amigo virtual, puedes desprender todo el calorcito que necesitas en los agradables días otoñales, desde tu casa y sin complicarte para nada.
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